Scrigno se encuentra entre los defensores del proyecto de inclusión social promovido por la Fundación «I Bambini delle Fate» (Los niños de las hadas), la organización social fundada en 2005 por iniciativa de Franco y Andrea Antonello que, gracias al proyecto «Attori si nasce… non si diventa» (Los actores nacen… no se hacen), tiene la intención de construir un centro educativo e inclusivo para niños y adolescentes con dificultades psicosociales.
Esta contribución es la manifestación concreta de nuestra estrategia corporativa orientada a la innovación social. Scrigno apoya a la comunidad combinando su conjunto único de activos corporativos con los recursos de otros actores, para generar soluciones relevantes a problemas sociales, donde los recursos de la empresa se ponen a trabajar con fines éticos.
El proyecto «Attori si nasce… non si diventa» (Los actores nacen… no se hacen), parte integral de la campaña nacional «Fare Impresa nel Sociale» (Emprender en lo social), está destinado al territorio de Forlì-Cesena para jóvenes discapacitados de entre 6 y 18 años. Sus objetivos son crear contextos educativos en grupo, fomentar el desarrollo de habilidades sociales, capacidades interpersonales e interacciones espontáneas, construir vínculos de amistad y facilitar que las familias se conozcan a través de encuentros con los padres.
Francesco Bigoni, director de marketing del Grupo Scrigno, ha declarado: «Nuestra empresa comparte los mismos valores que la Fundación y la Asociación, es decir, esforzarse por difundir una visión con “cara sonriente” del autismo y cualquier forma de diversidad, aprovechando el potencial de los niños y el gran coraje de sus familias».
Las actuaciones se refieren concretamente a actividades para potenciar la autonomía básica, talleres expresivos (teatro, multimedia, arte, estimulación basal y actividades corporales), talleres ocupacionales creativos, animación, juego libre guiado, convivencia y salidas. En este sentido, el teatro se convierte en un importante medio de comunicación social, en el que la diversidad actúa como un elemento enriquecedor para experimentar el sentirse bien en compañía, estimulando nuevas amistades, sonrisas y oportunidades.